
Arco de Guerra
Evelyn es una de las nigromantes más fuertes conocidas hasta la fecha. Y a pesar de que gracias a sus poderes, no tendría problema de enfrentarse a cualquiera y derrotarlo con mayor o menor facilidad, siempre va acompañada por su Arco de Guerra.

► Historia
Cuando la nigromante llegó a la tierra árida que convertiría en un futuro en Venganza de la Muerte, tuvo que hacer uso en constantes ocasiones de su magia para poder defenderse de los oscuros seres que deambulaban por aquel lugar.
Sin embargo, una de las noches en las que estaba colocando a sus criaturas no-muertas en el campo de batalla para protegerse, vio que necesitaba una invocación más poderosa que todas las anteriores y que en caso de no hacerlo, podía ser su fin.
Sin entender muy bien cómo, generó su primer Dracoliche. Un ser fuerte que no tardó en ahuyentar a las sombras nocturnas y que pronto buscó más víctimas en las que poder descargar toda su furia. El ejército no-muerto que la nigromante había generado fue su siguiente objetivo y cuando éste ya había desaparecido, el esqueleto fijó su mirada en Evelyn haciéndola saber que sería su próxima víctima.
La nigromante trató de defenderse, pero el haber generado aquel Dracoliche (que era el primero que invocaba), había hecho que se quedase prácticamente sin magia con la que poder devolver los golpes al no-muerto. Vio cómo su magia podía volverse en su contra, pero Evelyn también entendió el poder que albergaba en su interior. Sin embargo, aquello que hacía mucho había sido un animal, tenía a la mujer arrinconada y pronto la mujer sería simplemente un recuerdo en la mente de unos pocos si no actuaba con rapidez.
De pronto, su magia aumentó. Sacó poder de donde no sabía que tenía y consiguió derrotar a su invocación. Pero la nigromante necesitaba recordar de alguna forma lo que había ocurrido aquella noche. Debía saber lo poderosa que podía llegar a ser… y que aquel poder también podía destruirla.
Así que no dudó en coger el alma del Dracoliche y encerrarla en su arco de madera. Un arco que siempre llevaba consigo pero que nunca había utilizado porque era incapaz de acertar con sus flechas a sus objetivos.
Pronto el arco empezó a rodearse por una niebla oscura. Tan oscura que era incapaz de ver siquiera sus propias manos.
Cuando la niebla desapareció, su arco era distinto. Lo que antes era una madera poco trabajada, ahora estaba recubierto por huesos. En el centro del arma, sobresalían dos colmillos puntiagudos que habían pertenecido al Dracoliche. Además partes del arco, se volvieron moradas… del mismo color de los ojos del no-muerto.
Después de examinar unos instantes su nueva adquisición. Se levantó lentamente. Observó a todos lados y cargó una de las flechas que llevaba guardadas en una pequeña bolsa que tenía en su espalda. La colocó en el arco con sumo cuidado y poco después disparó clavando la flecha en el ojo de un cuervo que sobrevolaba el cielo. Había sido un disparo certero.

► Datos
- Su Arco de Guerra no falla NUNCA ningún disparo.
- Conserva su arma con muchísimo cuidado. No se perdonaría romperlo o perderlo.
- Jamás se lo presta a nadie. Sólo ella puede usarlo.
- Los huesos que rodean el arco, son los del Dracoliche de aquella noche.
- Actualmente sigue albergando el alma del Dracoliche en él.